sábado, 22 de octubre de 2016

Retroantifranquistas de papá en Barcelona...

Durante siglos, espetarle a alguien "A moro muerto, gran lanzada" ha sido sinónimo de decirle cobarde y bocazas. Es propio de los que alardean de acciones heroicas cuando no hay el más mínimo riesgo. Como los mierdas de Alsasua, los totalitarios de la UAM o los tardoantifranquistas cacalanes en los últimos días.


Extraordinaria valentía la de estos niñatos que no tardaremos en ver de concejales, como la asaltacapillas y tantos otros con coleta o sin ella.

No opinaban igual sus padres y sus abuelos en la Barcelona franquista que creó la riqueza de la que ahora disfrutan, a costa del abandono gubernamental del resto de España, para favorecer a catalanes y vascos que siempre han sacado tajada; con dictadura o sin ella...

1 comentario:

Mi opinión dijo...

El hundimiento de la Economía catalana, el despilfarro del dinero público, las carencias sanitarias, las comisiones por obras públicas, el empobrecimiento social catalán, el resurgimiento de la violencia, la gran deuda a proveedores, etc., etc.
Se pone una muleta y que entren los jumentos.