viernes, 6 de noviembre de 2015

Impedir el delito es mejor que condenar su comisión... ¿No?


¿No es mejor evitar que se cometa un delito que esperar a que se consume para condenarlo?
Supongamos que, Dios no lo quiera, unos facinerosos anuncian a bombo y platillo que van a secuestrar a un hijo del Presidente del Gobierno o que van a violar en grupo a una hija de algún magistrado del Tribunal Constitucional o que van a llevar a cabo cualquier otra abominable acción delictiva. ¿No tendrían que impedir las autoridades, a través de las Fuerzas de Seguridad del Estado, la comisión de tales delitos de los que se tiene conocimiento de que se van a llevar a cabo, porque los propios delincuentes lo han anunciado?

¿Y por qué cuando la escoria pesetero-separatista anuncia reiteradamente una violación de la Constitución y del Estado de Derecho, no se actúa con la contundencia debida y se aniquila políticamente, enchiquerándolos, a los sediciosos?

Rajoy pagará en las urnas su pasividad y permisividad con los traidores; pero los demás ciudadanos lo pagaremos mucho, mucho, más caro. Tanto que quizás no podamos distinguir quién fue más miserable, si Artur Más y sus felones o Mariano Rajoy y su Gobierno con la última mayoría absoluta...
De la Peose y de neoZP, mejor ni hablar...

1 comentario:

Mi opinión dijo...


Con el "zotepedrobis" esperando para apuñalar a España por la espalda, el término y disolución de una legislatura, la enorme cobardía del pueblo, la estupidez generalizada, etc., etc., va a ser imposible parar el desastre de "una muerte anunciada".

La transición desde Franco a la Democracia fue pacífica, con sus pasos y sus consensos, con visión de Estado y visión de futuro. Este Golpe de Estado es abrupto, violento, traumático, sin preparar e impredecible.

Volveremos a retroceder tres décadas y el hambre hará el resto.