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Tras las declaraciones del presidente de los empresarios alemanes en Cataluña, Sr. Peters, contrarias a una hipotética independencia de esa comunidad autónoma, el bocazas de más arriba ha lanzado otro de sus habituales rebuznos.
El Sr. Peters no ha criticado al nacionalismo catalán sino que ha enumerado las catastróficas consecuencias para la economía que tendría la independencia catalana. Tampoco sabemos el origen nazi o no de este señor o de sus empresas, pero jugar con esas palabras le podría acarrear una querella al patético diputado; acusar al empresario alemán de cómplice de asesinato debería llevar al banquillo al tipejo de energúmena lengua... Cosa que a una inmensa mayoría nos llenaría de felicidad.
Y por último, que semejante caricatura de parlamentario utilice en su perfil la imagen de Mandela, que en paz descanse, es nauseabundo; como el propio personaje que se deleita en la compañia de los mierdarras.
